Visita a Freiburg

Freiburg es una ciudad casi con el mismo encanto que HD y digo casi porque hay una diferencia esencial: mientras que en HD la vida se circunscribe a la calle principal, en Freiburg parece que la vida está un poco más repartida, lo que la vuelve más cómoda para la vida del día a día al ser más fácil llevar a cabo las cosas cotidianas aunque no vivas en el centro, pero hace tal vez que no se pueda considerar una bonita postal dada su dimensión (o al menos la aprecicación de la misma que puede tener un viandante al comparar ambos lugares)

Este es el canal principal con el cocodrilo de piedra al fondo

Pero démonos un pequeño barniz cultural. Tras la Segunda Guerra Mundial, Alemania se dividió en cuatro zonas de ocupación o control: Americana, Soviética, Inglesa y Francesa. El centro de esta última era el lugar en el que actualmente se sitúa Freiburg. Tras la salida de los franceses del país, se decide formar una ciudad en este lugar donde a resultas de la base militar ya han decidido por aquel momento vivr un gran número de alemanes. Esto hace que aquí se hable no sólo alemán sino también francés.

Desde luego hay una cosa que llama la atención nada más entrar a l centro: los canales de agua. Inicialmente ideados para labores de extinción de incendios, en la actualidad sirven apra que los niños jueguen. Sobre todo con unos barquitis que pueden comprarse cerca de plaza Joseph Kaiser. Toda la recaudación de los mismos va destinada a tratamientos para el cáncer infantil

Además hay una pequeña historia relacionada con los canales: parece ser que si una mujer se cae en alguno DE FORMA NO INTENCIONADA, se enemorará del primer hombre que vea tras la caída. Esta hostoria que no deja de tener cierto encanto si uno no tiene una patata en lugar de corazón, puede ser tan fabricada como la queimada (un amigo me sorprendió al contarme que al aprecer es un invento de Fraga)... pero qué más da ¿No?

Lo que sí tiene Freiburg son Iglesias:

Por cierto si tenéis suerte podréis ver en el alguna las ceremonias de las hermandades universitarias:

Por supuesto y como no podía ser de otra forma, en esta ciudad también hay un rinconcito patrio, en el que tomarse unas bravas, o un pinchito de tortilla.:

Los precios son bastante populares, pero el camarero es un suizo que tiene un humor muy, muy peculiar... vamos que sus gracias no tienen gracia, pero no olvidemos que a los suizos se les conoce por los relojes, las navajas, el chocolate comer y los paraísos fiscales... una policía al nivel de sus impuestos...  y pot REX un policía diferente.


Por cierto hermanos moteros, os hago una pregunta, ¿Habéis visto alguna vez una así?

Hasta pronto.